El 10 % de los nacimientos en Rumanía provienen de madres adolescentes, al igual que el 45 % de los nacimientosen la Unión Europea entre niñas menores de 15 años provienen de Rumanía, que ocupa el primer lugar en esta categoría. Así lo dice la organización "Save the Children", que en un informe muestra cuál es, de igual manera, la conexión entre el nivel educativo y la edad de las adolescentes de comunidades rurales desfavorecidas que se convierten en madres.
El 85 % de las madres y mujeres embarazadas menores de 18 años ya no asisten a la escuela, la mayoría abandona antes del embarazo. Una de cada 10 admite que no ha ido a la escuelanunca, y tres cuartas partes abandonaron la escuela antes del octavo grado.
Es preocupante, también, que 4 de cada 10 mujeres embarazadas o madres menores de edad no busquen otros servicios médicos durante el embarazo, aparte de los que ofrece el médico de familia. Un tercio de las futuras madres jóvenes dice que no se hizo ningún análisis médico, siendo la razón principal la falta de dinero: la mitad de sus familias tienen un ingreso mensual de menos de mil leus, el equivalente a solo unos 200 euros. A su vez, el 80 % no usaba ningún método anticonceptivo, por no tener información al respecto.
Las estadísticas presentadas por "Save the Children" también muestran que las tres cuartas partes de las madres o embarazadas menores de edad tienen familiares o conocidas que dieron a luz cuando tenían menos de 18 años. Y un tercio de ellas mismas son hijas de madres menores de edad.
En Sălaj (noroeste), por ejemplo, decenas de niñas reciben apoyo a través de un programa iniciado por un grupo de trabajo especial establecido en la provincia. A través de este programa, las madres menores de edad se benefician de servicios médicos, sociales y educativos para poder integrarse en la sociedad. Violeta Milaş, directora de la Dirección de Asistencia Social y Protección Infantil de Sălaj, nos habla de estas madres: "La mayoría proviene de zonas rurales, donde estas mujeres jóvenes o niñas, estas madres menores de edad no tienen documentos de identidad, partidas de nacimiento, sus familias se han ido... Cuando llegan al hospital y dan a luz, no hay partida de nacimiento ni documento de identidad. El registro de niños es un problema. Según la educación y cultura de estas familias, es normal dar a luz a esta edad. Tuvimos que enseñarles cosas básicas sobre higiene para que luego fueran capaces de criar a sus propios hijos. En las comunidades donde hay asistentes sociales capacitados y auxiliares médicos comunitarios, ahí se ven resultados, en el sentido de que se les hace un seguimiento, se les enseñan ciertas cosas y la situación de estas madres es más sencillaʺ.
En Bucarest, en el Ministerio de Sanidad, hace un año, después de una ausencia muy larga, se ha restablecido una estructura para ocuparse de la salud maternoinfantil. También se está trabajando para establecer alrededor de 200 centros comunitarios integrados a nivel nacional, ubicados en zonas habitadas por población vulnerable, que ofrecerán servicios tanto médicos como sociales. Sin embargo, el ministro Alexandru Rafila afirma: para que las mujeres embarazadas y las madres menores de edad tengan acceso a los servicios médicos y sociales, debe existir como base una asociación entre las autoridades centrales y las locales.
El Ministro Rafila también cree que la educación es esencial y que el número de madres menores de edad en Rumania solo podría disminuir si fueran a la escuela y la educación para la salud se convirtiera en una disciplina permanente, que formara parte del plan de estudios: "Creo que el problema principal está relacionado con el acceso a la educación y, en segundo lugar, -pero no necesariamente el segundo en importancia, se derivan uno del otro- el acceso a la educación para la salud. El acceso a la educación para la salud es muy importante, es multidisciplinar, no se trata exclusivamente de educación sexual, y deberíamos evitar limitarnos exclusivamente a este ámbito, la educación sexual. Tenemos un nuevo ministro de Educación y estoy convencido de que podremos encontrar una solución para que la educación para la salud se convierta en una disciplina permanente, adaptada a cualquier edad, que forme parte del currículo. Pero no podemos tener una educación para la salud si estos niños no van a la escuela. Está claro que el problema está relacionado con un trasfondo cultural, muchas veces pertenecen a minorías, a grupos vulnerables que tradicionalmente se casan a edades extremadamente jóvenes y, como resultado, tienen hijosʺ.
En julio de 2022, se promulgó en Rumanía la ley con respecto a la introducción, a partir del octavo grado de la escuela secundaria, de algunas clases de educación para la salud, en las que los estudiantes pueden participar con la aprobación de sus padres. Y para la consejera presidencial Diana Păun, esta educación para la salud es una prioridad, porque es el filtro a través del cual se ofrece a las generaciones presentes y futuras la posibilidad de elegir de manera informada y responsable. La consejera Diana Păun también promete otros cambios: "Dentro de la educación para la salud, la educación sexual es un componente importante que tiene el potencial de cambiar estas estadísticas grises, por no decir negras. En las áreas rurales y en las comunidades aisladas, existe la mayor necesidad de una red de servicios de medicina escolar funcional, de educación sexual y planificación familiar, y el Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia ha priorizado esto. La inversión en equipamiento y rehabilitación de clínicas de planificación familiar en regiones vulnerables, con gran número de embarazos adolescentes y gran número de enfermedades de transmisión sexual, se cuenta como un pilar importante en el PNRR en materia de sanidad y contribuirá a mejoras considerablesʺ.
Las necesidades son, en consecuencia, muchas y están en muchos ámbitos. Una reforma que lleve a cambios profundos también debería apuntar, por ejemplo, a los recursos humanos en sanidad: el número necesario de profesionales con las especializaciones adecuadas y su distribución geográfica óptima. Al mismo tiempo, se debe recopilar información y desarrollar una situación más integral en el campo de la salud maternoinfantil en comunidades socialmente aisladas y no integradas. También es fundamental la comunicación y la cooperación entre los servicios públicos de asistencia social, los servicios médicos y las instituciones educativas. Todos estos pasos, ¡e incluso más!, son esenciales, dado que se sabe, por un lado, que el embarazo a edades tempranas implica mayores riesgos, y, por otro lado, la maternidad prematura expone a las madres jóvenes al riesgo de abandonar la escuela y de ingresar en el círculo vicioso de la pobreza, con efectos de generación en generación.
Enlaces de interés
Copyright © . All rights reserved